domingo, 25 de diciembre de 2011

CONOCER Y MIRAR

"Todo ha sido descubierto - dice Jean Paul Sartre - menos cómo vivir".
Bueno, eso se va descubriendo poco a poco. Y cada uno necesita su propio proceso.
La pena es que nuestra estancia en este universo concreto, contrariamente a lo que pensamos un día, no es demasiado larga. Nunca se aprende del todo, cierto es. Pero, si hay suerte, a la mitad de la vida podemos saber, al menos, lo que no queremos.

domingo, 18 de diciembre de 2011

LOS SECRETOS Y ALGUNAS COSAS SOBRE EL TIEMPO PASADO Y POR VENIR

Los Secretos han sido mi grupo emblemático durante muchos años. Un grupo con una historia que es casi nuestra historia, la de aquellos que empezaron a hacerse adultos al final del siglo XX y empezaron a ser niños de nuevo, a principios del siglo XXI, seguramente ahora. En este transcurso, algunos no hemos dejado de ser jóvenes ( "Déjame" es una canción con la que recorrí cientos de kilómetros por las carreteras españolas, con la música alta, pues siempre me ha gustado conducir envuelto en música, sin notar el camino, pese a lo mucho que paro siempre para no hacer del trayecto un tour de force) bueno el caso es que, al encontrarme con Los Secretos, una constante en mi vida, me doy cuenta de que no he cambiado nada desde aquél muchacho que se escapo a Inglaterra, por primera vez, a los quince años, y que luego volvió, un poco más tarde y ya para más tiempo, a una tierra en la que siempre se encontró menos extraño que en su propia patria. Sí, cuando escucho a Los Secretos, me pasa lo mismo que cuando veo una película ambientada en Inglaterra, o cuando viajo a Portugal, otro país que considero mío. O cuando juego al ajedrez - mi padre me enseñó a jugar a los cuatro años - o veo una película con la sala a oscuras, tomando notas que luego paso a mis cuadernos de viaje y cine, que ambas cosas pueden estar unidas. Porque yo creo en la vida unida y diversa, en la vida que forma un círculo, nuestro círculo elegido, que no está cerrado, sino abierto, y cuya circunferencia exterior es irregular y porosa y, aunque admite nuevos lugares de encuentro y referencia, sin embargo, el interior, lo más personal del círculo, permanece. El interior del círculo es como una semillita que nació conmigo y que nunca paró de crecer, siempre en el mismo sentido: el de aprender, descubrir, conocer. Y también de añorar y mantener lo que sabes que es tu identidad. Porque, una vez que sabes quien eres, una vez que descubres donde estás y donde siempre has estado, aún con muchos viajes exteriores, es dificil cambiar de ruta y de destino. No puedes dejar de ser tú.

http://www.youtube.com/watch?v=rYNW1IxaFf4