domingo, 9 de noviembre de 2008

FRIO

Frío en la cara...música de clarinete rodeada de invierno…¿60? ¿70?... años de cronología, de permanencia de los sueños, de tener que ganarse la vida tocando. Ahora en la calle, en una esquina, como un adorno de Navidad con alma.

Paso deprisa por la avenida de la Paz y la paz me parece más callada que nunca. Paz como nombre y como estancia silenciosa de la escasez, del tiene que ser así porque no hay otra.

Mientras, con los botones abrochados hasta arriba, el hombre del clarinete, ¿50?¿60?, apoya la espalda sobre una fachada de mármol. Lejos de su país, de su lengua, sus recuerdos. Lejos de la vida, aunque las notas de la melodía nos parezca que levantan su espíritu.

Escondido, asustado por el largo viaje hacía la tierra que pensó de promisión, sigue tocando mientras ve como los transeúntes caminan deprisa, perdidos entre sus pensamientos.

El los observa, a la vez que sopla y modula las notas de Smetana en la esperanza de encontrarse con ellos y noten su presencia. Con la esperanza de que se detengan y hagan una pequeña pausa para mover unas monedas desde sus bolsillos hasta el tapete tendido en la acera.

Pero hace frío. Demasiado frío para desalojar la mano del guante.
Demasiado frío para mirar. Y pararse.


(Emilio Porta. De Diario de un Sublunar, Noviembre 2008)

4 comentarios:

Javier dijo...

Emilio: ¡Haz el favor!

Aquí estoy, tranquilo y arropado en mi casa,envuelto en un batín y disfrutando con lecturas varias y llegas tú y me enfrentas a la calle, al frío, a la desesperación, a la pobreza... Esa mano que Dios te ha dado para escribir remueve el aire.

Un saludo
Javier

Anónimo dijo...

Gracias, Javier. Pero tu también remueves el aire con tu escritura. Tu relato Mary ha sido el centro de comentario de las más sugestivas tertulias literarias de los alrededores de la Puerta del Sol. Que eras un buen escritor, lo sabía. Que además eres un estupendo amigo, empiezo a darme cuenta
Que la literatura y la vida nos siguan uniendo.

Emilio

Un abrazo.

Emilio Porta

Alejandro dijo...

Emilio, leo y releo y has conseguido que saque la cabeza de los bolillos, los pies de los guantes y las manos de los zapatos para volver a ver las cosas de siempre de forma diferente.

"Eres la leche".

Alejandro

Alejandro dijo...

Donde pone "bolillos" he querido decir bolsillos. Creo que esaba pensando en las puntillas de las enaguas o en los bodoques de alguna bufanda rara y antigua. Lo siento

Alejandro